El CPAU y las cuestiones de género
Valeria del Puerto
El compromiso del 30%, la reformulación del histórico Manual del Ejercicio Profesional del Arquitecto y la guía de prevención.
Como presidenta del CPAU, quiero contarles los cambios que encaramos para la inclusión de las mujeres, su representación y el lugar que deben ocupar no solo en nuestra matrícula sino en la sociedad.
El CPAU es una entidad que realmente está liderando en este tema. No solo ahora, sino desde el año 2002 cuando estableció el cupo del 25% del género opuesto para la composición del Consejo.
Pero también, hace algo más de dos años, el CPAU adhirió el Compromiso 30%[1], que significa la participación de, como mínimo, ese porcentaje de mujeres en eventos o charlas que organiza o auspicia nuestra institución. Fuimos una de las primeras entidades en firmar un compromiso de este tenor, incluso hemos llegado a dar de baja auspicios por no cumplir con esta premisa. También replanteamos por completo los ciclos de charlas y presentaciones para que la convocatoria de mujeres arquitectas sea equitativa con la de los arquitectos. Y en todo lo que hacemos, prestamos especial atención a la participación lo más pareja posible de mujeres y hombres: un ejemplo de esto es nuestra revista Notas CPAU.
Por otro lado, un hecho realmente histórico para la matrícula es la corrección del MEPA (Manual del Ejercicio Profesional del «Arquitecto») con lenguaje inclusivo. No solo su contenido: le cambiamos el título luego de un debate en el que participaron la Comisión de Ejercicio Profesional, la Gerencia General y en la que nos involucramos personalmente la abogada del CPAU, la asesora en Comunicación, la gerenta técnica y yo. Ahora se llama Manual del Ejercicio Profesional de la Arquitectura.
Desde el año pasado, con el nuevo protocolo de Comunicación elaborado en el área Institucional, incorporamos la utilización de un lenguaje lo más inclusivo posible, no solo para el género femenino (por ejemplo, nombramos matrícula en lugar de matriculados). Aunque en algunos casos todavía no podemos escapar del binarismo de la A y la O, consideramos que igualmente ya es un gran cambio discursivo. En el mismo sentido, se hicieron talleres de redacción con el staff para trabajar sobre este nuevo protocolo.
Otra tarea significativa es la de modificar nuestro estatuto en esta dirección, ya que quedó atrasado y nos urge actualizarlo. Por otro lado, también estamos redactando una «guía de acciones y mecanismos de prevención» para cuestiones de género.
Sin dudas, queda un camino por andar, pero felizmente ya estamos recorriéndolo.
[1] El Compromiso 30% es una iniciativa del colectivo Un día una arquitecta, en la que se invita a las instituciones afines a la profesión a «suscribir el compromiso de no participar en encuentros, congresos, seminarios, bienales y otros eventos que no cuenten con un mínimo de un 30% de expositoras, revisando los mecanismos para otorgar auspicios y apoyos económicos».