Escape

Ana García Ricci, Lucia Ardissone, Ignacio Fleurquin

miércoles, 22 de marzo de 2017  |   

Paisaje, arquitectura y la riqueza de lo interdiciplinario

Escape es un espacio que decidimos crear para la difusión, cruce y construcción de nuevos conocimientos sobre temá­ticas en torno a pensar el paisaje hoy. Con un espíritu libre y colectivo, el primer Escape abrió sus puertas en julio de 2014 de una manera casi espontánea. Las puertas son las de nuestro estudio Bulla, ubicado en el mítico barrio Los Andes en Chacarita, con el que durante más de 6 años venimos de­sarrollando proyectos e investigaciones de paisaje, públicas y privadas, en la ciudad. Durante este trayecto hemos experi­mentado y construido una nueva mirada del ejercicio profe­sional, redefiniendo y rompiendo los límites disciplinares. En el último tiempo, decidimos volver a las raíces: a la explora­ción de nuestro territorio, al reconocimiento de su estructura y el funcionamiento del paisaje bajo una mirada holística que incorpora al hombre y a la naturaleza como parte de un todo. Un todo que está en constante cambio y alteración.

Este nuevo enfoque permitió la expansión intelectual para repensar nuevas problemáticas territoriales, tanto ambientales como infraestructurales. Es ese medio donde comenzó a gestarse la necesidad de incorporar nuevos conocimientos potenciado a la vez con la falta de un espacio académico donde podamos compartir nuestras experiencias. Al estar fuera del sistema, decidimos crear nuestro propio sistema.

Nuestra idea fue poder crear un espacio informal, donde no existan los límites académicos ni las certezas jerárquicas. Un espacio social, donde la gente se conozca, charle, donde pue­dan nacer cosas nuevas. Un espacio donde puedas tomar y tirarte en el piso a escuchar y disfrutar. El formato era simple: una hora de exposición y una hora de debate y charla colecti­va. Son gratuitas, libres y no requieren inscripción previa.

Con las tres primeras ediciones se asentó la idea: Brian Davis de la Universidad de Cornell, Marcos Castaings de Fá­brica de Paisaje, y el alemán Jens Wolter fueron los primeros Escapes, completando la trilogía de invitados extranjeros.

Y entonces, ya en 2015, volvimos a pensar sobre lo recorrido. Queríamos volver a las raíces y convocamos a quien fue un gran maestro nuestro: Rolando León. Él fue quien nos mostró de alguna manera de qué se trataba la Ecología del Paisaje, lo que consideramos algo así como “ un eslabón perdido para la arquitectura”. Carismático y divertido, Doctor y Ecólogo, Profesor e Investigador, Rolando venía a contarnos sobre cómo funciona la naturaleza, a la vez que la sala pasaba las 80 personas y ya no se podía respirar. Ar­quitectos, Planificadores, Diseñadores del Paisaje y alumnos pensando en posibilidades futuras entendiendo al paisaje como el primer dato, entendiéndolo primero para luego operar. Rolando lamentablemente falleció un mes después del Escape, dejándonos su legado y un registro mágico de lo que fue esa noche.

Para este 2016 decidimos duplicar la apuesta de las charlas y disminuir nuestro nivel de certezas: determinamos un eje temático del paisaje como articulador anual, decidimos que sean dos los invitados, y que cada uno pertenezca a una disciplina diferente pero que compartan el mismo campo de acción. Decidimos así atravesar el conocimiento desde varias aristas, convertirlo en un espacio mucho más plural y comple­jo. En junio lanzamos el “Territorio Liquido” y para la quinta edición cruzamos a un estudio de arquitectura con un equipo de biólogos, ambos trabajando sobre la misma unidad de paisaje: Islas y Delta del Paraná. El espacio quedó colmado de gente escuchando a Arquitectos Todo Terreno y luego al Proyecto Pantano. Esta vez el público se enriquecía aún más de nuevas disciplinas: diseñadores industriales, ingenieros civiles, desarrolladores inmobiliarios, isleños, entre otros.

De alguna manera esto que alguna vez surgió de manera espontánea hoy empieza a consolidarse como una cofradía abierta a nuevos conocimientos y experiencias, al cuestio­namiento de viejos paradigmas y estructuras, para construir nuevas miradas y una nueva cultura de relacionarnos con la naturaleza. Entender para operar.