La construcción tecnológica del espacio
Daniel Ventura
La capacidad técnica del material con el cual producir arquitectura proporciona los modos productivos y expresivos para generar el espacio, y la forma no es abstracta sino estrictamente dependiente de una materialidad.
Si bien sabemos que la tecnología está presente en la arquitectura, sería conveniente realizar un recorrido por distintas ideas al respecto para poder comprender su implicancia en nuestra disciplina.
La Real Academia Española define la palabra tecnología como el lenguaje propio del arte y como el conjunto de instrumentos y procedimientos industriales de un determinado producto. La configuración de los elementos constitutivos de una obra de arquitectura y su materialización producen una expresión particular y significativa en la obra. La técnica cumple un rol importante en la construcción material del objeto y su expresión es una posibilidad de generar lenguaje. Siguiendo la idea que propone Ana María Rigotti en su trabajo sobre materialidad, la forma es una manera de desmontar el modo de producción de cosas y a menudo esa forma como tal no es abstracta sino estrictamente dependiente de una materialidad. La experimentación tecnológica devela los mecanismos de producción material para la realización del proyecto.
Ignacio Paricio en el capítulo “Las técnicas” del libro La construcción de la arquitectura, clasifica a las prácticas constructivas utilizadas en arquitectura como sistemas de producción por montaje, sistemas de producción por mampuestos y sistemas de producción por colados. Todos estos modos influyen directamente sobre la configuración del objeto arquitectónico. Su investigación está centrada en las formas con los que se vinculan cada uno de los elementos o las lógicas de repetición, en el caso de los mampuestos; en los moldes con los que se van a realizar los colados y determinar sus texturas; y en las uniones de los elementos que componen los sistemas de montaje.
Cualquiera de los sistemas tiene diferentes maneras de ser producidos tanto de forma individual o conformando sistemas mixtos de producción material.
El estudio de las técnicas posibilita la creación expresiva de la obra y su modo coherente de utilización la vuelve inteligible. La materialización de la estructura tiene un valor preponderante en la arquitectura y los elementos que la componen no sólo son el sostén de la obra sino que son los que generan y producen el espacio arquitectónico. Se trata de una conceptualización en términos tectónicos, que involucra tanto el problema de la relación entre pesos, esfuerzos y materiales como el de las formas y los requerimientos humanos.
Kenneth Frampton ha elaborado el problema de la construcción tectónica enfatizando en el espacio cuando cita las ideas de Schmarsow, quien percibe la arquitectura como el despliegue progresivo del sentimiento del hombre con respecto al espacio y lo identifica como principio conductor de toda forma arquitectónica. De esta manera, coincide con los modelos de espacio-tiempo del universo en el sentido científico: la ciencia afecta la forma de concebir el espacio, reforzado por la experiencia de la velocidad y las invenciones mecánicas de la última mitad del siglo XX. Desde entonces, dice Frampton, “somos incapaces de pensar arquitectónicamente sin hacer especial énfasis en el desplazamiento espacial del sujeto desplazándose en el tiempo.”
La capacidad técnica del material con el cual producir una obra de arquitectura proporciona los modos productivos y expresivos para generar el espacio. Cualquier material es objeto de experimentación técnica y es capaz de generar nuevos lenguajes expresivos en la arquitectura contemporánea. Para Zumthor los materiales no tienen límites: "(...) tomen una piedra: podrán aserrarla, afilarla, horadarla, hendirla y pulirla, y cada vez será distinta. Luego tomen esa piedra en porciones minúsculas o en grandes proporciones, será de nuevo distinta. Pónganla luego a la luz y verán que es otra…”
Planteados estos puntos de vista sobre las cuestiones tecnológicas en arquitectura, podemos pensar que la idea de la construcción material es la que determina el lenguaje expresivo de la obra y que los sistemas de producción que se utilizan para la construcción son los que determinan la configuración material del espacio arquitectónico.
Fotografía de portada Casa de ladrillos. Buenos Aires, Argentina. Ventura Virzi Arquitectos