Sostenibilidad y certificación de edificios
Nicole Michel
Mi aproximación a lo sostenible es desde la mirada del arquitecto: los conceptos proyectuales más esenciales, el alma de un proyecto la relación entre las condicionantes del hábitat ambiental y social, y la respuesta arquitectónica en términos de emplazamiento, volumetría, desarrollo de envolventes, estrategias de acondicionamiento pasivo, entre otros deberían sentar las bases de diseño, sobre las cuales desarrollarlo, y a las que luego pueden adicionarse capas de información más sofisticadas técnicamente, para amplificar su rendimiento, su adaptabilidad a impactos climáticos, energéticos, operativos.
Mis estudios en MIT me abrieron los ojos. Los primeros talleres de arquitectura en los que trabajé me permitieron crecer y ampliar mi formación. Después, vocación en un entorno de búsqueda de nuevos paradigmas en respuesta a cambios cada vez más perceptibles.
Niemeyer decía que la vida siempre le pareció más importante que la arquitectura. Para mí, lo sostenible excede lo puramente arquitectónico en su estrecha relación con lo social y cultural y las distintas maneras de habitar espacios. También supera lo estrictamente eficiente: si el objetivo primordial es el de dar refugio, éste debe ser lo más resiliente posible, con su consecuente impronta social y económica.
Ser sostenible y resiliente no pasa por una moda, sino por pensar, crear, imaginar un ambiente construido que pueda perdurar, y pueda, como tal, ser testigo de lo que pasó y de todo lo que aún está por venir.